Todo se cae
Caer no es agradable, más bien es doloroso; a los que no nos gusta esa sensación que produce el caer, procuramos buscar una cura o solución inmediata, que en muchos casos, no es la más adecuada. Se nos cae el ánimo y nos sentimos apáticos, intentamos dejarnos llevar por los amigos y salimos a disipar; si se nos cae el pelo, operación peluca, terapia capilar, se siembra pelo o nos ponemos un turbante; si se caen los senos a levantarlos con el bisturí o a levantar pesas; se caen puentes y torres y se busca solución; cae la virilidad masculina y una publicidad de la TV les ofrece a los caballeros la sonrisa de una mujer joven, que refleja satisfacción, por que el marido uso el producto que anuncian. ¿? Cuando caemos debemos levantarnos, midiendo aun con dolor las posibilidades de hacerlo y tomándonos el tiempo que necesitamos para lograrlo. Así hice yo, cuando pasando por la calle Martín Puchi en Don Bosco, tropecé con unas cajas de madera, que estaba...