La Capilla del Hombre
Cuando pensamos en una capilla lo asociamos a un centro para orar o rezar, al escuchar capilla pensamos en vírgenes y santos, en el perdón de nuestros pecados y por supuesto pensamos en una iglesia. Oswaldo Guayasamín, indígena y pintor ecuatoriano pensó en capilla y pensó en pintar la tragedia de la humanidad, sobre todo la tragedia de América a través de su historia de los últimos quinientos años, por sentir y amar creó LA CAPILLA DEL HOMBRE. Un monumento sobrecogedor y santo donde el artista logró plasmar el dolor, la muerte, la ira, la miseria, la angustia de hombres, mujeres y niños de nuestros pueblos. La grandeza de esta Capilla está en como el silencio del color y el lamento de una imagen cobran vida con el vértigo de la expresión, como expresó Hugo Martínez Roble, agregando, “los colores se escuchan, las imágenes gritan, los sonidos transportan y agudizan los sentidos, para comprender lo incomprendido La Pietà de Guayasamín no lleva firma del autor, por este considerar ...